Post by Sombra (#187) on Jun 7, 2011 23:28:33 GMT -5
-Cuatro gatos en una pared blanca.-
En nuestro ultimo capitulo: Samanta Riehfehlstad, uno de los adolescentes Perfectos creados con ingeniería genética planeaba realizar un ataque contra el sector V, pero Ally la localiza antes que siquiera pueda acercarse a la base.
Después de unos minutos de combate, Ally cae gravemente herida, la prepotente y orgullosa Samanta da un puñetazo en el estomago de Ally y ella da un golpe seco contra el piso.
-maestro cuatro, perdóneme, pero ella es muy poderosa. –en su imaginación, se ve a si misma tirada en el piso y con cuatro mirándola desde una cercana pared blanca. –Ma…maestro Cuatro.
-¡tonta! ¿Por qué te rindes tan fácilmente? Pensé que al menos tendrías el coraje de pelear como un verdadero guerrero.
-es imposible, mis golpes no le hacen daño.
-¿y piensas que yo me rendiría tan fácilmente? No importa que tan fuerte sea tu rival, es tu espíritu de lucha el que te permite ganar, no tus puños. –arqueando una ceja. –siempre supe que golpeabas como niña y aun así te he llegado a respetar.
-Cuatro…yo no…
-esta bien, ríndete, has lo que quieras…pero ni pienses que te volveré a mirar como un igual, tal vez te llegue a valorar, como a un montón de basura, claro. –saltando al otro lada del muro.
-vaya, que desperdicio, esta niña pensó que estaba a mi altura. ¡Que se siente ser basura, niñita! -agachándose.
-abriendo los ojos. –no lo se, tu nunca me has dicho que se siente. –Ally, empieza a golpear a Samanta con una velocidad y precisión increíble, como si de una fiera salvaje se tratara. –aunque tenga que patearte mil veces, no dejare que una tonta, arrogante y despectiva zorra se atreva siquiera a pensar que puede derrotarme. –le mete una patada a la cara. -¡ahora quien es Basura, perra! –después de decir eso, sus fuerzas se desvanecen y pierde el conocimiento.
-escupiendo sangre. –maldita, esto nunca te lo perdonare. –intenta dar una patada al cuerpo inconsciente. – ¡Muere!- cuando intenta matarla con su patada, es interceptada por otra patada. – ¡pero que carajos!
- vaya, veo que no te importa matar a tus rivales. Soy Ilse, la Daimyo del sur, pero puedes llamarme “la chica que reventara tu rostro en el pavimento”.
-¿la chica que? –Ilse da una patada a la nuca de su rival, estrellando su rostro en el pavimento.
-¿lo vez? Hazme caso.
¿Quien será esa misteriosa Ilse y cuales serán sus planes? ¿Acaso un amigo? ¿O un enemigo?
Continuara…